El Gobierno esconde el ataque de Marruecos al móvil de Sánchez en su informe sobre espionaje
En Francia señalan a Sánchez por la crisis con Argelia: «Marruecos tiene información sobre su mujer»
Seguridad Nacional alertó 5 veces a Sánchez de Pegasus tras «el espionaje a 13 líderes mundiales»
El CNI instó en julio de 2021 al Gobierno de Sánchez a «revisar sus móviles» por los ataques con Pegasus
El supuesto espionaje con Pegasus al móvil del presidente y de los ministros Margarita Robles (Defensa) y Fernando Grande-Marlaska (Interior), abrió en mayo una crisis institucional que acabó por cobrarse a la directora del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Paloma Esteban. Moncloa disponía desde hacía años de numerosos avisos del Centro Criptológico Nacional (CCN)-dependiente de los servicios de Inteligencia-, en los que se alertaba expresamente del riesgo de ataques con este sistema espía. Seis meses después, el último informe del CCN, en el que se analizan las amenazas e incidentes de 2021 -Ciberamenazas y tendencias- ni lo menciona. Tampoco los ataques a los móviles del Gobierno, cuya autoría se ha atribuido, sin confirmación, a Marruecos.
En el dosier, al que ha tenido acceso OKDIARIO, no hay referencia alguna a este programa software, como sí la había en años anteriores. En 2019, por ejemplo, el mismo informe alertaba del «crecimiento de los ataques a dispositivos móviles» y avisaba expresamente de las «técnicas de phishing móvil» como «Dark Caracal y Pegasus» empleadas por «actores avanzados», como los Estados. En otros documentos, el CNI aludía también al programa espía, perfeccionado para penetrar en los dispositivos y robar información sensible aprovechándose de las vulnerabilidades de los sistemas operativos.
Ahora, en cambio, Pegasus no aparece en el registro de «incidentes» detectados en 2021 -según Presidencia las intrusiones tuvieron lugar en mayo y junio de ese año-, aunque sí hay alusión a la amenaza que suponen los «grupos de ciberespionaje vinculados a Estados». «Los ataques más sofisticados, así como de mayor duración en el tiempo», se recoge en el informe, «están relacionados con acciones de ciberespionaje, llevadas a cabo principalmente por grupos asociados a intereses de ciertos Estados». «Dichos ciberataques», prosigue, «tienen como fin obtener información sensible que proporcione ventaja estratégica y que ayude a alcanzar los intereses y objetivos de un Estado». Durante 2021, «los principales agentes de la amenaza han sido los grupos de ciberespionaje vinculados a Estados y los grupos dedicados al cibercrimen» y «los principales objetivos, las organizaciones dedicadas a la investigación, así como para la defensa nacional o gobiernos». Ni rastro de Pegasus ni de los ataques a los móviles del Gobierno.
El informe concluye con un análisis de las amenazas para este año, avisando de un aumento de los ataques «especialmente contra los países limítrofes con la Federación Rusa y países miembros de la OTAN» por la guerra en Ucrania. «Puesto que España pertenece a organismos internacionales que han sancionado las actuaciones llevadas a cabo por determinados actores en la contienda, es recomendable permanecer alerta y seguir las recomendaciones de autoridades en cuanto a la posible recepción de ciberataques por parte de grupos de amenazas persistentes», avisa Inteligencia.
Autoría
La autoría del espionaje nunca ha sido desvelada, aunque se ha apuntado a Marruecos. Incluso se ha especulado con que el giro histórico de Sánchez con el Sáhara -plegándose a la propuesta de Rabat- tendría su explicación en el supuesto robo de información sensible por este país. El digital francés France Soir llegó a hablar de informaciones «comprometedoras» encontradas por los servicios de Inteligencia marroquíes sobre negocios de Begoña Gómez, mujer del presidente socialista, en Marruecos.
“Entre las conversaciones telefónicas se encontrarían informaciones comprometedoras sobre la corrupción y el nepotismo de su Gobierno. Algunas de ellas implicarían a su mujer”, se afirmaba en el artículo.